VELA DIGEON Nº12 ELEVAR EL ALMA DE UN FALLECIDO

Si te encuentras en la necesidad de tener que elevar el alma de un ser querido, amigo o cualquier otra situación relacionada con alguna persona que ya fallecida o que trascendió a otro plano, te invita a probar mi vela conmemorativa consagrada con el Arcángel Azrael, el Arcángel Miguel y el Arcángel Gabriel durante 8 meses en mi altar, para rendir homenaje amoroso, para cortar las cadenas que lo puedan atar a la tierra y siga su camino de regreso al padre de donde un día su alma partió y para honrar la memoria de aquellos que han partido.

Esta vela especial está dedicada a celebrar la vida y el legado de quienes ahora descansan en paz y para que puedan hacerlo. Con cada parpadeo, sientes su espíritu cerca, recordándote que el amor perdura más allá de la frontera de la vida y la muerte.

Infundida con amor y gratitud, esta vela es una hermosa forma de recordar y honrar a tus seres queridos en momentos de reflexión y recuerdo. Utilizada como un símbolo de luz y esperanza, esta vela brinda consuelo y apoyo a aquellos que atraviesan el duelo y la pérdida y quieren conmemorar años de la partida de un ser querido.

Respaldada por la devoción y el respeto por la vida, esta vela es un recordatorio eterno del amor que compartimos con quienes ya no están esencialmente con nosotros. Al encender esta vela, se enciende una llama sagrada que ilumina el camino de los recuerdos, iluminando los rincones más oscuros de la nostalgia con su cálido resplandor y transmitiendo paz interior. El aroma suave y angelical que emana de la vela envuelve el espacio con una sensación de serenidad y ternura, invitando a la calma y la contemplación y hará que te sientas reconfortado.

El envase puede variar de cerámica, cristal transparente o cristal satinado.